El puente romano de Alcántara

Una inscripción en el centro del puente indica que fue construido en honor al emperador romano Trajano, nacido en Hispania. La inscripción dice lo siguiente: "Imp(eratori)· Caesari· Divi. Nervae·(filii)·Aug(usto)·Pont(ifici)·Max(imo)·trib(unicia)·potest(ate); En su entrada meridional se deja constancia en otra inscripción de que su ingeniero fue Cayo Julio Lacer. El puente de Alcántara fue construido gracias a los impuestos de siete villas lusitanas y pretendía unir la calzada de Norba Caesarina (Cáceres, España) a Conimbriga (Condeixa-a-Velha, Portugal) como estación de la Vía de la Plata. El nombre proviene de época andalusí en la Edad Media, ya que al-qantara ( القنطرة) significa el puente en árabe.

Ha sido varias veces cortado en las guerras uno de los arcos y reconstruido luego, debido a su situación fronteriza. Por primera vez en 1213, fue parcialmente destruido por los musulmanes. En 1475, en las luchas de Castilla y Portugal, cuando pensaban derruirlo para evitar que Alfonso V lo cruzara, se salvó por la gallardía del rey portugués que mandó decir a su enemigo, el duque de Villahermosa, que él daría un rodeo, pues «no quería el reino de Castilla con aquel edificio menos».

Más tarde fue recompuesto por Carlos I en 1543 desfigurando el perfil del arco central y coronándolo de almenas y rehaciendo el primer arco de poniente que fue destruido en 1213 cuando sitió la villa Alfonso IX para arrebatársela a los árabes. Para dejar memoria de la restauración se labró el escudo imperial que corona el arco del triunfo y se escribió:

Carlos V Emperador, Cesar Augusto y Rey de las Españas, mandó reparar este puente que deteriorado por las guerras y su antigüedad amenazaba ruina, el año del señor 1543, en el 24 de su imperio y 26 de su reinado.

Ilustración del puente de 1835 aparecida en la publicación británica The Penny Magazine.3
En 1707 durante la Guerra de Sucesión se destruye el arco de entrada de poniente y la restauración fue mandada por Carlos III en 1778. El segundo arco del puente fue destruido en 1809 durante la Guerra de la Independencia contra las tropas napoleónicas y hasta 1818 no se sustituye este arco por una estructura de madera para el paso de carruajes, pero fue incendiado en 1836 por las tropas isabelinas para impedir el paso de los carlistas, que mandados por Miguel Gómez Damas, habían invadido la provincia.


Puente de Alcántara en El Museo Universal, hacia 1857.
Fue nuevamente reconstruido, en 1860, por Isabel II. En esta última restauración del siglo XIX se taparon las juntas de las piedras y se añadió una inscripción que dice:

Elisabeth Borbonia Hispaniarium regina, norbensem potem antiquae provinciae lusitaniae, opus iterum bello interruptum, temporis vetustate pene prolapsum restituit aditum utrimque amplificavit, viam latam ad vaccaeos fieri iussit anno domine MDCCCLIX.
En septiembre de 1969, para construir el embalse de Alcántara, cuya presa se encuentra 600 metros aguas arriba del puente y cuya capacidad es de 3137 hectómetros cúbicos, se desvió el caudal del río a través de unos túneles y el lecho del río cauce abajo quedó completamente seco en varios kilómetros. Se observó entonces que una de las pilas estaba descalzándose, y se procedió a su reparación. El puente romano quedó por primera vez en su historia sin río.

Galería